Día Tercero. – Recuerda
hoy mi agricultor aquella frase de Álvaro Cunqueiro que decía: “Donde terminaba
el vuelo del mirlo empezaba el vuelo de la gaviota”. Es verdad, el agricultor
lo ha comprobado entre la tierra y el mar. Entre la costa murciana y el
Mediterráneo. Se ha dado cuenta que todo este vuelo empieza con los gritos de
huida de un mirlo y termina con los chillidos de las gaviotas, ahogados por el
silencio del Mar Menor. ¡¡¡Feliz miércoles!!!
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